Recuerdo del pasado

Recuerdos de un pasado 

En estos días en que todos estamos en casa sin poder salir, en los que buscamos cosas que hacer después de trabajar, donde hemos empezado a realizar esas cosas que siempre estaban pendientes porque no  encontrábamos el momento para  hacerlas. Uno de esos días me puse a organizar las fotos de las vacaciones de años anteriores y en ellas aparecen las fotos de  mi erasmus del verano pasado en  Cork.
Me pregunto si este año ¿podré hacer algún viaje a otro país, si podré ir a la playa, caminar por la arena bañarme en el mar...?. 
Pensé que podía compartir con vosotros algo de todo lo aprendido, visitado, conocido... en Cork y de esta forma volvía al verano y a Cork. 
Entonces busqué las fotos de cuando fui en Cork a los acantilados de Moher. Es un sitio maravilloso donde ves como se termina la tierra y empieza el mar, con una gran altura. El día que fuí hacía mucho viento, parecía que ibas a salir volando, y llovía a ratos; 
La altura de las rocas



Cada vez que veo estas fotos veo lo pequeño que es le hombre frente a la naturaleza, la impresión que causa la altura, el mar embravecido por el viento. Uno de los más bonitos regalos de las naturaleza.










Otros de los lugares que fui a ver en Cork, en una de las excursiones que realizaba la escuela donde estudiaba inglés, fue el fuerte Elizabeth que se encuentra en la parte antigua de Cork, es un emplazamiento amurallado que se termina de construir en 1601. Tiene labores defensivas para la ciudad. Es un monumento muy bien conservado, pero quizá lo que más me impresionó fue lo que hacían con los enemigos; tiene representado por cabezas  incrustadas en lo alto de las lanzas. Aunque las vistas son espectaculares.

















Una de las visitas obligadas, si vas a Irlanda es ver su capital Dublín, la impresión que me lleve de esa ciudad es una ciudad oscura ,triste, en la que se aprecia dos zonas muy bien diferenciadas; por una parte la zona donde se encuentran los ingles con sus casas victorianas y la otro donde vivían los obreros que trabajaban en las fábricas. Lo que separa era el río Liffey para pasar de una  a otra parte de la ciudad usaban el puente Ha'penny bridge, puente de medio penique, que es la cantidad que había que pagar para pasar por él. Uno de los personajes más famosos de Dublín fue Molly  Malone a que tiene dedicada una estatua, respecto a ella no se sabe que es leyenda o que es verdad depende de la persona que te cuente la historia. Algunas de los lugares  que merece la pena ver en Irlanda son sus cementerios con las cruces celtas y conocer su cultura celta. Algo obligado que uno no puede dejar de hacer, incluso en la escuela había un día a la semana donde se iba, es conocer los pub Irlandeses y tomarse una pinta, lo maravilloso de eso además es que hay música en directo. La cerveza más famosa es Guinness, cuya fábrica está en Dublín.






Os recomiendo a todo el que pueda que realice un erasmus, es una de las mejores experiencias que puedes vivir, empezando porque así sabes cual es tu verdadero nivel de inglés que tienes, porque ves como te defiendes al comunicarte con los demás, si entiendes cuando te hablan o vas a una visita guiada, aprendes palabras nuevas... es muy enriquecedor para conocer una nueva. El principal motivo de hacer Erasmus es conocer una lengua distinta a la habitual, pero una vez estás allí te empapas de otras muchas cosas como conocer su cultura, tradiciones, su forma de vida, como interactúan entre ellos, como se relacionan.. infinidad de sensaciones que se quedan cortas con los conocimientos para expresarlos. Yo me quede con una familia irlandesa y me tuve que adaptar a sus horarios y su forma de vida , quizás de todo lo que más me costó fue  cenar a las 6 de la tarde y comer solo un tentempié como comida, y el hecho de tener pocas verduras y frutas añoré mucho nuestra comida.
Ahora después del tiempo que ha pasado y mirando todo desde otra punto vista, tengo que reconoce que ha sido una experiencia maravillosa y que volvería a repetirla sin ninguna duda.


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